Tras tres años de espera, la segunda temporada de “El Juego del Calamar” aterrizó en Netflix, superando la ambición y la brutalidad de su predecesora. Seong Gi-hun, el superviviente que se hizo con el premio millonario, renuncia a la riqueza para infiltrarse en el macabro juego y acabar con su creador, el enigmático Líder. Interpretado nuevamente por Lee Jung-jae, Gi-hun emprende una implacable búsqueda de venganza, convirtiéndose de nuevo en peón en este juego mortal para enfrentarse al despiadado multimillonario. La trama se intensifica capítulo tras capítulo, culminando en un final abierto que dejó a los fans con la incógnita de un posible desenlace. La incertidumbre, habitual en Netflix con sus series, se disipó rápidamente. Para deleite de la audiencia, una tercera temporada fue confirmada meses antes del estreno de la segunda, tal y como anunció el propio Hwang Dong-hyuk. En sus palabras, Gi-hun, con su juramento de venganza tras la primera entrega, volverá a la arena para un último enfrentamiento con el Líder; un choque definitivo que marcará el cierre de la saga en su tercera y última temporada. La decisión de concluir la historia, lejos de prolongar artificialmente su éxito, demuestra el compromiso de Netflix y el creador por preservar la calidad narrativa.
Dong-hyuk confirmó un estreno en 2025. Aunque detalles concretos escasean, se especula que la producción de ambas temporadas fue simultánea para respetar los plazos. Si bien un lanzamiento en cualquier momento del año es posible, es más probable que Netflix reserve el estreno para diciembre, siguiendo la estrategia empleada con la segunda temporada. Sin embargo, la quinta temporada de “Stranger Things”, recién terminada de filmar, podría competir por ese espacio en la programación navideña. En cuanto al contenido de la tercera entrega, el secretismo reina. Lee Jung-jae regresa como Gi-hun en su misión de venganza o muerte, pero tráiler, imágenes promocionales o sinopsis oficial aún permanecen ocultos.
