30 de mayo de 2024– A poco menos de dos meses de las elecciones presidenciales en Venezuela, la situación política sigue siendo dinámica. Según ORC Consultores, la clave para el éxito en estas elecciones será la capacidad de defender el voto. El 20 % de la población ha demostrado disposición para organizarse en este sentido.
Oswaldo Rodríguez Colina, director de la encuestadora, advierte sobre la importancia de contar con al menos 4 personas por mesa (un total de al menos 120 mil personas) para enfrentar las malas prácticas que ocurren durante el proceso electoral y demostrar un triunfo legítimo.
En 2013, la oposición alcanzó su mejor momento de cobertura con un 83 % de los centros. Sin embargo, Rodríguez Colina advierte contra el triunfalismo y enfatiza la necesidad de una sólida defensa del voto. La campaña debe recorrer todo el país, mantener a los votantes comprometidos y evitar que los indecisos se abstengan.
En cuanto a la participación, se espera que al menos el 33 % de la población vote en las elecciones del próximo 28 de julio. Los ciudadanos tienen en mente dos opciones: el cambio o la continuidad. Cualquier narrativa fuera de estos dos planteamientos no está teniendo espacio.
La salida de la Unión Europea no está siendo un factor determinante, ya que los electores están enfocados en aprovechar las condiciones mínimas para lograr un cambio.
La intención de voto ha experimentado cambios significativos. Antes de las primarias, el 44 % deseaba votar en las elecciones presidenciales. Después de ese evento, la estadística ascendió al 60 %. En un período de un mes, el indicador creció poco más de 8 puntos, llegando al 66 %.
Edmundo González, candidato de la Unidad, ha ganado visibilidad. La cifra de personas que lo conocen ha aumentado del 45 % al 95 %. Su intención de voto también ha crecido, pasando del 18 % al 50,7 %. Otras opciones incluyen “no sabe” (18,50 %), Maduro (13,70 %), no vota (6 %), no contesta (4 %), Benjamín Rausseo (2,15 %) y Javier Bertucci (1,5 %).
Este proceso electoral se perfila como un momento crucial para Venezuela, donde la defensa del voto y la participación ciudadana serán determinantes en el resultado final.
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